En el marco del foro 'Proteger la vida y transformar los territorios: Seguridad y Paz Total', el ministro de Defensa, Iván Velásquez, y el comisionado de Paz, Otty Patiño, lideraron un panel sobre articulación entre las políticas de paz y seguridad en el gobierno del presidente de Gustavo Petro.
La cita tuvo lugar en la Universidad de los Andes, donde el Ministerio de Defensa Nacional, la Maestría en Construcción de Paz de la Universidad de los Andes y el Instituto de Paz de los Estados Unidos convocaron a un foro público para que diversos sectores de la sociedad dialogaran sobre las estrategias de articulación entre la actual búsqueda de la paz con grupos armados y la política de seguridad.
En el conversatorio, Patiño y Velásquez reflexionaron sobre la dificultad alrededor de que los distintos procesos con grupos al margen de la ley se traduzcan en beneficios para la población civil.
"Las mesas descansan sobre la transformación territorial. Eso incluye desescalamiento del conflicto. Otro tema fundamental es si de verdad hay voluntad del actor armado de transitar hacia la civilidad", mencionó Patiño.
El jefe de las Fuerzas Militares hizo énfasis en la caracterización de los grupos armados: "no están en la disputa del poder, del control del Estado, sino en el control de las comunidades y los territorios con una finalidad de enriquecimiento. Narcotráfico, minería ilegal, extorsión. Es lo que hacen (...) Si tratamos con una organización dedicada al narcotráfico o la minería ilegal, que se disputan el control de las finanzas, entonces la manera de las conversaciones deben ser diferentes", indicó.
En ese sentido, aseguró que la transformación del territorio no puede ser "justificación de nada". A renglón seguido recalcó que "la paz necesita seguridad" y que en regiones de conflicto es necesario que la Fuerza Pública tenga todas las capacidades para responder a cualquier eventualidad.
El comisionado también compartió esa tesis: "Sin Fuerza Pública no es posible la paz".
'Los ceses al fuego fracasaron'
Otro punto importante de la conversación fue el resultado de los ceses al fuego. Por un lado, Patiño reconoció que no solo en este Gobierno sino a lo largo de la historia los ceses al fuego "fracasaron".
"El cese al fuego no puede ser la espina dorsal de la negociación. Los ceses al fuego fracasaron (...) Estar en una mesa de negociación significa un tema de respeto por la mesa y no un fortalecimiento de ningún actor armado", dijo, y agregó que el éxito de estos acuerdos también depende de la voluntad de los actores armados.
Por su parte, Velásquez sostuvo que se deben fortalecer los mecanismos de verificación y monitoreo. "El cese no es un objetivo, no podemos perder de vista que en muchas cosas parece que fuera lo fundamental y ocupa la agenda, pero el avance en las negociaciones no se advierte. El cese que interesa es el que beneficie a las comunidades".
Suspensión de ordenes de captura
Sobre el final, el ministro de Defensa señaló que la suspensión de órdenes de captura "está generando impunidad". Para Velásquez, si se suspende una orden de captura el actor armado debe estar estrictamente dedicado a los temas referentes a la mesa de negociación e igualmente se requiere de seguimiento y control a los beneficiados.
JUAN PABLO PENAGOS RAMÍREZ
Redacción Política