Tras varios meses de debates, propuestas y contrapuestas, la aprobación de la reforma laboral entró en su recta final y esta semana se llevarán a cabo las últimas discusiones en el Congreso de la República.
Dado que esta es la segunda legislatura en la que se debate, su aprobación debe concretarse antes del 20 de junio; de lo contrario, se hundirá por falta de trámite porque en este caso no aplican las sesiones extras.
Los debates en la plenaria del Senado se reanudarán este lunes 16 de junio y, según la congresista Angélica Lozano, se está “bien de tiempo”. La idea es terminar de aprobar los 19 artículos que hacen falta ese día.
La conciliación de los textos aprobados en Senado y Cámara se hará el martes y el miércoles, mientras que entre jueves y viernes se espera aprobar el texto unificado en ambas plenarias.
Debate de la reforma laboral en la plenaria del Senado. Foto:César Melgarejo/El Tiempo
Si este cronograma se cumple y la reforma laboral queda lista antes de la medianoche de este viernes, el proyecto de ley pasará a sanción del presidente Gustavo Petro para comenzar a implementar los cambios aprobados.
“Habrá reforma laboral justa por ley y el 'decretazo' se cae por su peso. Es un abuso de poder y tendrá el presidente (Gustavo Petro) que justificar cómo, con una reforma bien hecha, insiste en violar la Constitución”, aseguró Angélica Lozano, también presidenta de la Comisión Cuarta del Senado.
Habrá reforma laboral justa por ley y el 'decretazo' se cae por su peso
Angélica LozanoPresidenta de la Comisión Cuarta del Senado
Por lo pronto, los congresistas les dieron luz verde a 57 artículos y eliminaron uno durante los debates que se realizaron esta semana en la plenaria del Senado. El trámite en la Cámara de Representantes se realizó en octubre de 2024.
El artículo eliminado fue el 17, que buscaba crear una prima del 4 por ciento, adicional a las que recibe actualmente un trabajador. Se pagaría cuando las empresas registraran un crecimiento económico superior al 4 por ciento.
Foto:Cortesía Mercado Libre
Entre los artículos aprobados se resaltan aquellos que establecen como regla general el contrato laboral a término indefinido (5) y que, en ningún caso, las horas extras de trabajo, diurnas o nocturnas, podrán exceder de dos horas diarias y 12 semanales (14).
Además, pasaron los artículos sobre la experiencia laboral de las personas privadas de la libertad (21) y la remuneración con un salario no inferior al mínimo a los estudiantes de medicina que cumplan con los requisitos de admisión para realizar el internado médico obligatorio (24).
Otros artículos aprobados tienen que ver con la seguridad social y riesgos laborales en plataformas digitales de reparto (29) y la posibilidad de que las microempresas y hogares puedan realizar pagos a la seguridad social a tiempo parcial (36).
También se destaca la creación de un programa de primer empleo para los jóvenes recién graduados mediante la generación de incentivos a las empresas (47) y que el empleador pague un auxilio de conectividad para los teletrabajadores que ganen menos de dos salarios mínimos, en reemplazo del auxilio de transporte (57).
Foto:iStock
Los artículos que faltan de la reforma laboral
Algunos de los artículos que faltan por aprobarse son los que más preocupación han generado entre los empresarios, ya que aumentarían considerablemente los costos laborales.
Uno de ellos es el artículo 11 a través del cual se busca adelantar la actual jornada nocturna desde las 9:00 p. m. a las 7:00 p. m. Además, se busca aumentar del 75 al 100 por ciento la remuneración por trabajar un día festivo o dominical (artículo 15).
Este cambio se implementaría de manera gradual: a partir del 1.° de julio de 2025 sería del 80 por ciento; un año después subiría al 90 por ciento y el 100 por ciento se alcanzaría el 1.° de julio de 2027.
De acuerdo con Anif, con una reducción de la jornada diurna y sin cambios en el horario, el monto adicional que deberá pagar una empresa por un trabajador que recibe un salario mínimo (1’423.500 pesos) será de aproximadamente 113.233 pesos, equivalente a un aumento de 8 por ciento del salario base.
Además, con el recargo del 100 por ciento por días dominicales y festivos, una empresa tendría que pagarle a un empleado 363.963 pesos que trabaje de viernes a miércoles, a diferencia de los 272.972 pesos que paga actualmente. Esto representa un incremento en el costo del 6,4 por ciento.
Foto:Abel Cárdenas. Archivo EL TIEMPO
El análisis de Anif también indica que estos cambios afectarán, principalmente, a los sectores cuya franja de operaciones se desarrolle durante jornadas nocturnas, dominicales y festivos, como el comercio, alojamiento, restaurantes, entretenimiento, transporte y algunas industrias, en especial la de alimentos.
Sumado a esto, con unos mayores sobrecostos las empresas no tendrían incentivos para generar nuevos puestos de trabajo en el país. Por el contrario, podrían generarse estímulos para trasladarse a la informalidad y así evadir los nuevos costos.
Anif estima que, en un escenario medio, la pérdida de empleos en estas actividades económicas podría alcanzar los 140.000 puestos, siendo el principal factor de presión el aumento en los costos derivados del cambio en la jornada diurna.
Otro tema de esta reforma laboral que ha generado bastante polémica es el relacionado con los aprendices del Sena. Por ejemplo, el artículo 25 dice que las empresas obligadas a cumplir la cuota de aprendizaje tendrán que pagar cada mes 1,5 salarios mínimos por cada aprendiz que no contraten.
Igualmente, el artículo 23 establece que los aprendices recibirán de la empresa una remuneración del 75 por ciento de un salario mínimo mensual en la etapa lectiva, mientras que en la práctica deberá ser un salario completo.
Foto:Página web del Sena
También están pendientes de aprobación los artículos relacionados con la estabilidad laboral reforzada (9), una jornada de cuatro días de trabajo y tres de descanso (12), los trabajadores de tiempo parcial (37), las garantías del derecho de asociación sindical (63), la vinculación de las madres comunitarias y sustitutas (74) y la formalización laboral de las personas manipuladoras de alimentos del PAE (75), entre otros.
Para Anif, los sobrecostos laborales que trae la reforma afectan de manera más pronunciada a ciertas actividades con menor capacidad de generar empleo formal y a las empresas de menor tamaño.
Por eso, su presidente José Ignacio López recomienda incorporar un parágrafo que establezca la obligación de realizar una evaluación de los efectos de la reforma en el mercado laboral dos años después de su entrada en vigor.
Si se evidencia una disminución en los niveles de formalidad, debería contemplarse una extensión en los plazos de transición hacia los nuevos recargos por trabajo en días de descanso y una revisión de otros costos laborales.
Por el contrario, si se concluye que el mercado laboral formal no se ve afectado, y la evaluación resulta favorable, no habría ningún cambio.