Recientemente, un incidente en el Aeropuerto Internacional Washington Dulles dejó en evidencia la rigurosidad de las regulaciones de Aduanas y Protección Fronteriza de EE. UU. (CBP, por sus siglas en inglés) sobre la importación de productos animales. Un viajero que llegó de Guinea Ecuatorial trajo consigo más de dos libras de carne de serpiente, un alimento común en su país, pero que es considerado inadmisible bajo las leyes agrícolas estadounidenses.
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Según aclaró la entidad en su página web oficial, el perro detector de agricultura de CBP, un beagle llamado Freddie, fue clave en la detección de este producto. Durante un examen secundario, los especialistas en agricultura de CBP confirmaron la presencia de la carne de serpiente, por lo que activaron un protocolo de revisión mucho más exhaustivo.
Regulaciones sobre la importación de productos animales
Desde el portal citado aclaran que las leyes agrícolas de EE. UU. establecen restricciones claras sobre la importación de ciertos productos animales y vegetales. La carne de serpiente, en este caso, violó varias regulaciones, incluidas las de la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (CITES, por sus siglas en inglés) y la Ley Lacey. Estas leyes buscan proteger la biodiversidad y regular el comercio internacional de especies en peligro de extinción.
Después de confirmar la inadmisibilidad de la carne de serpiente, los especialistas en CBP consultaron a los inspectores de vida silvestre del Servicio de Pesca y Vida Silvestre de EE. UU. (USFWS, por sus siglas en inglés). Este paso es de suma importancia, ya que el USFWS es responsable de regular la importación de productos de vida silvestre. Los inspectores de dicha entidad corroboraron que la importación de la carne sin los permisos adecuados era ilegal, lo que llevó a CBP a confiscar el producto el 12 de septiembre.
Marc Calixte, Director del Área del Puerto de CBP en Washington, DC, destacó la colaboración efectiva entre CBP, el USFWS y el Departamento de Agricultura de EE. UU. “Este esfuerzo conjunto es fundamental para asegurar que todos los productos importados cumplan con las leyes y regulaciones pertinentes, tanto a nivel nacional como internacional”, sostuvo.