Liverpool sufrió para ganarle al colero, pero un doblete de Salah lo salvó de la catástrofe: Luis Díaz fue suplente y erró una ocasión clara

Un partido lleno de goles se vivió este domingo en el estadio St Mary’s Stadium. El Liverpool, con mucho sufrimiento, se quedó con la victoria (2-3) en su visita al Southampton y es líder en solitario de la Premier League.

Liverpool no tuvo un encuentro brillante, pero la calidad de sus individuales y los groseros errores del rival le permitieron llevarse los 3 puntos en la fecha 12 de la liga inglesa. El equipo del DT Arne Slot tuvo que trabajar más de lo esperado contra el último de la tabla.

Southampton sorprendió con el planteamiento a un Liverpool que no tenía la maquinaria aceitada y que dejó en el banco de suplentes a varias de sus figuras, entre ellas el colombiano Luis Díaz, quien tuvo un largo viaje desde Suramérica.

Liverpool pasó aceite

A pesar del juego opaco, Liverpool se puso en ventaja en el minuto 30 tras un grave error del Soton. Una mala salida le pasó factura al local y el húngaro Dominik Szoboszlai no perdonó: controló y sacó un zurdazo colocado para el 0-1 parcial.

Pero el partido se hizo cuesta arriba para los visitantes tras un penalti muy polémico por una jugada que discutió todo Liverpool. El juez cobró falta dentro del área y el VAR no encontró suficiente evidencia para determinar que la infracción fue afuera del área.

Adam Armstrong ejecutó el penalti que fue atajado por el arquero de Liverpool, pero en el rebote no perdonó e igualó las acciones (1-1) antes del final de la primera parte.

En el complemento, Liverpool mostró flaquezas en defensa y Soton aprovechó. El local hizo una transición rápida de defensa a ataque y aprovechó las lagunas defensivas de los Red’s. Mateus Fernandes recibió el balón en el área y anotó el 2-1 parcial.

Arne Slot movió el banquillo y envió al terreno de juego a Luis Díaz, quien tuvo su ocasión de gol en la primera jugada que protagonizó en ataque, pero el mal cálculo y el centro atrás de Darwin Núñez lo privó de marcar.

Liverpool resurgió gracias a los errores del Southampton. Mohamed Salah empató las acciones en el minuto 65, tras una salida en falso del arquero rival, quien nunca vio el balón y dejó su portería desguarnecida.

Pero el fallo insólito llegó en la recta final del partido. Yukinari Sugawara tocó el balón con la mano en el área de forma increíble y el árbitro decretó penalti para Liverpool. Salah, el goleador de los Red’s, no perdonó desde los 12 pasos y anotó el 2-3 final.

Con la ventaja en el marcador y los apuros en defensa que pasó, el Liverpool cuidó la victoria y, aunque tuvo opciones de aumentar la ventaja, no quiso ir decididamente por otro gol para no sufrir alguna sorpresa.

Liverpool ganó con mucho sufrimiento y empieza a hacer una diferencia muy importante ne la tabla de posiciones de la Premier League que lidera con 31 puntos, 8 unidades más que su escolta, el debilitado Manchester City. 

HAROLD YEPES

DEPORTES