Desde el sábado se conoció que Daniel Mendoza ya no sería el embajador en Tailandia. A pesar de las varias defensas del presidente Gustavo Petro a su designación, este decidió declinar ante la polémica que causó el anuncio. Y es que las diferencias no solo vinieron de la oposición, sino que desde el mismo seno del primer mandatario se expresaron divergencias.
Fueron pocos, más allá de algunos congresistas y lo que se han denominado ‘bodegas’, los que defendieron la llegada de Daniel Mendoza al servicio diplomático. En cambio, adentro del gobierno y desde el Pacto Histórico fueron varios los que llamaron la atención del Presidente y le pidieron que reconsiderara su postura.
Juan Fernando Cristo, ministro del Interior y Daniel Mendoza Foto:Archivo EL TIEMPO/Daniel Mendoza
EL TIEMPO pudo conocer que uno de los que pidió que se echara para atrás fue el canciller Luis Gilberto Murillo. Este habría dicho que el primer mandatario tiene la facultad exclusiva para los nombramientos diplomáticos, pero al mismo tiempo le llamó la atención por las nominaciones que contradicen la diplomacia progresista y feminista que enarboló desde campaña y que ha implicado tener a figuras como Laura Gil y Arlene Tickner. Precisamente las dos embajadoras itinerantes también fueron otras de las que se manifestaron en contra de la llegada de Mendoza. Estas lo hicieron de forma pública.
Otro que dejó evidenciar que no estaba muy de acuerdo con esa designación fue el ministro del Interior, Juan Fernando Cristo. En diálogo con W Radio hizo énfasis en que estaba de acuerdo con que este diera un paso al costado. “Yo creo que es una decisión acertada que el señor Daniel Mendoza deje en libertad al Gobierno. Se acaba la controversia que es, creo, justificada por las publicaciones de redes y los recientes hechos”, puntualizó el ministro.
Un hecho llamativo fue que dos de los ministros que saldrían en el remezón de fin de año fueron los que se manifestaron en contra de la llegada de Mendoza a una embajada. Antes de confirmarse sus salidas ya estarían expresando posturas que los alejan de los designios de la presidencia.
El canciller Luis Gilberto Murillo. Foto:Cancillería
Rupturas en el seno de la izquierda
No solo fueron los dos ministros los que se apartaron de la decisión. Como se evidenció antes, dos importantes nombres en el servicio diplomático tampoco recibieron de buena forma a Mendoza. A estos se suman varias mujeres ligadas con el gobierno y el Pacto Histórico.
Una de las primeras fue la senadora Jahel Quiroga, vicepresidenta de la UP. En un extenso trino cuestionó al mandatario. “¿Cómo explicarles que, por un lado, tenemos una política exterior feminista y, por otro, se nombran personas cuyas acciones hacen apología a la violencia sexual contra mujeres y niñas?”, dice uno de los apartados del mensaje que dirigió a Gustavo Petro y que este le respondió con un extenso trino el sábado.
También la vicepresidenta y ministra de la Igualdad, Francia Márquez, fue otra de las que hizo público su criterio en contra del fallido embajador en Tailandia. “Como vicepresidenta de la República y ministra de la Igualdad no puedo tolerar la misoginia. Este gobierno fue elegido por las mujeres que creen en el cambio y en la eliminación de todas las violencias patriarcales. Por esta razón, no es posible que quienes van en contra de la promesa del cambio con las mujeres integren este gobierno”, indicó.
El presidente Gustavo Petro no tomó a bien esas posiciones, como lo evidencia un trino que publicó el domingo. Este compartió el mensaje en video de Daniel Mendoza en respuesta a Francia Márquez y a Laura Gil y lo acompañó con una dura crítica.
La mandataria pidió que se reversara la decisión tomada en la embajada. Foto:CEET: Mauricio Moreno/@elquelosdelata
“Que los uribistas persigan a alguien porque los denunció es lógico; pero que en nombre del progresismo se discrimine a las personas por sus escritos, no es posible”, indicó Petro, que a renglón seguido dijo: “Los tribunales de la santa inquisición no caben en una mente progresista”.
El analista Gabriel Cifuentes tuvo una lectura de lo que ocurrió en el intercambio de trinos: “Vicepresidenta cuestiona públicamente al presidente por postulación de Mendoza. En respuesta presidente repostea respuesta de Mendoza a ella. Una inconveniente muestra del distanciamiento y de las comunicaciones rotas”.
Como este, otros han señalado que el episodio de Daniel Mendoza las últimas grietas que se han creado en el Ejecutivo y que surgen justo cuando comienzan las salidas para poder aspirar en las elecciones de 2026.
JUAN SEBASTIÁN LOMBO DELGADO
Redacción política