Este fin de semana se conoció sobre un trágico hecho ocurrido en zona rural que comparten los municipios de Manizales y Neira. Fue asesinado Nicolás de Jesús Giraldo, un exalcalde del municipio de Marulanda, oriente del departamento de Caldas.
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Giraldo había sido mandatario local de dicho municipio en dos ocasiones. La primera fue cuando fue asignado al cargo para reemplazar a Rigoberto Castaño Tovar, quien -siendo alcalde- fue asesinado por integrantes del frente 47 de las FARC en el año 2006.
El exalcalde, de 59 años de edad, quien se dedicaba a negocios del agro, fue asesinado de varios disparos al interior de su finca, así lo informaron las autoridades.
“El cuerpo sin vida fue hallado al interior de una finca ubicada en la vereda El Guineo, zona rural del municipio de Neira en límites con Manizales, con múltiples heridas de arma de fuego en hechos ocurridos en la tarde del sábado”, dijo Liliana Andrea Jiménez Falla, comandante del departamento de Policía Caldas.
Al momento se desconocen los móviles de este hecho; sin embargo, una de las hipótesis estaría relacionada con el robo de una considerable suma de dinero. Información preliminar indica que el exalcalde habría vendido una parte de la cosecha de café, razón por la que tendría un monto considerable en su poder. Por ahora, todas las líneas de investigación siguen abiertas, pues no se descarta que haya habido otros motivos.
“Hemos desplegado equipos técnicos de investigación criminal e inteligencia especializados con el propósito de identificar a los responsables de estos delitos y llevarlos ante la justicia”, agregó la oficial refiriéndose también a otros dos homicidios que se registraron durante el pasado puente festivo.
Leonardo Giraldo, actual alcalde de Marulanda, expresó sus condolencias a la familia. "Nos unimos en solidaridad y lamentamos profundamente su partida. Fue líder social y político por muchos años. Una persona muy amable y cercana a la comunidad", agregó.
La sombra de un asesinato
Giraldo, recordado por sus cercanos como un buen alcalde, una persona amable y servicial falleció a manos de delincuentes, tal como Rigoberto Castaño Tovar, quien fue asesinado en el año 2006 por militantes de dicha guerrilla que estuvieron asentados en la zona del oriente caldense.
Giraldo llegó a la Alcaldía tras ese lamentable suceso, pues alguien debía asumir las riendas del municipio. Posteriormente fue reelegido en el año 2016.
Su antecesor, Castaño Tovar, fue asesinado también con disparos de arma de fuego por varios hombres vestidos con camuflados, según reportes de la época. Los homicidas atacaron al funcionario cuando viajaba en su automóvil por una carretera a 20 minutos del casco urbano del municipio.
Este crimen se dio en medio de otros ataques de grupos subversivos que tuvieron lugar en esa época en varias zonas del departamento.
Por este hecho hubo varias capturas en 2009 y, finalmente, dos personas fueron condenadas.