La planta milenaria que mejora la digestión, calma la mente y descongestiona

Desde tiempos antiguos, la menta ocupa un lugar especial tanto en prácticas medicinales como en rituales. Con su característico aroma fresco que se desprende al frotar sus hojas de un verde profundo y textura suave, esta planta se utilizó en civilizaciones como la griega, romana y egipcia por sus cualidades digestivas, relajantes y descongestionantes, además de su reconocido aporte a la salud bucal.

Su distribución es amplia: crece de manera silvestre en regiones templadas de África y Europa, mientras que en América y Asia suele cultivarse con facilidad. 

Su historia

El uso medicinal y espiritual de esta hierba se documenta desde épocas remotas. En América Latina, los pueblos indígenas la utilizaban como planta terapéutica, un dato registrado en la 'Guía Ilustrada de Plantas Medicinales' en el Valle de México. En África, existen referencias de su empleo con fines digestivos que datan del 1550 a.C.

Presente en la cocina, la industria y la vida cotidiana

Tradicionalmente usada como infusión en la gastronomía árabe, la menta fue introducida en Europa, donde encontró en las tierras húmedas de Gran Bretaña condiciones ideales para prosperar.

En esa región, se popularizó la variedad menta piperita, la misma que da sabor a numerosos productos como chicles, caramelos y pastas dentales. Hoy, su presencia abarca múltiples industrias: herbolaria, cosmética, limpieza, aceites esenciales y salud bucal.

Propiedades digestivas y más

“Las hojas de menta fresca son ricas en antioxidantes, como ácido rosmarínico, además de poseer pequeñas cantidades de vitamina A y C. Su aceite esencial contiene mentol, un compuesto con propiedades antiinflamatorias y antimicrobianas", describe la licenciada en nutrición, Valentina Martínez.

Una de sus cualidades más conocidas es su acción sobre el sistema digestivo. “El mentol estimula la secreción biliar, lo que mejora la digestión de grasas”, añade la especialista. 

Además, señala que esta planta ayuda a relajar los músculos del tracto gastrointestinal, lo que resulta útil para aliviar cólicos, gases e hinchazón. También se recomienda para mitigar síntomas del síndrome premenstrual y dolores abdominales.

Efecto relajante y antiestrés

Un estudio publicado en el Journal of Pharmacy & Pharmacognosy Research indicó mejoras significativas en memoria, ansiedad, estrés y calidad del sueño entre estudiantes universitarios. 

Para llegar a esta conclusión, se dividió a los participantes en dos grupos: uno consumió infusiones de menta diariamente durante cuatro semanas, mientras que el otro se abstuvo de ingerirla o de consumir cualquier otra hierba. Las evaluaciones se realizaron antes y después del tratamiento, usando cuestionarios autoadministrados.

Acción descongestionante y respiratoria

En lo que respecta a afecciones respiratorias, el sitio Medical News Today informa que el mentol presente en la menta facilita la expulsión de flema y mucosidad. 

Además, destacan su utilidad en casos de asma y resfriados comunes por su efecto refrescante en las vías respiratorias. “La aplicación de ungüentos o frotaciones de menta puede ser una alternativa segura y eficaz”, comunican.

Aporte a la salud bucal

El sabor característico de la menta y sus propiedades antibacterianas la convirtieron en un ingrediente frecuente en productos de higiene oral. 

El estudio 'Aceites esenciales, sus propiedades terapéuticas e implicación en odontología: una revisión' concluye que “los productos con aceite esencial de menta tienen el potencial de ser desarrollados como agentes preventivos o terapéuticos para diversas enfermedades bucales”. 

Sin embargo, el mismo documento aclara que “se requieren más ensayos clínicos para establecer su seguridad y eficacia”.

Formas de consumo y advertencias

En cuanto a sus usos, la licenciada Martínez aclara que la menta fresca conserva mejor las vitaminas, mientras que la seca concentra mayor cantidad de antioxidantes. “En infusión, se aprovechan sobre todo los compuestos volátiles como el mentol, pero se pierde fibra y parte de las vitaminas”, advierte.

A pesar de sus múltiples virtudes, es importante tener precaución con su consumo. “Hay que evitar los suplementos o aceites esenciales sin indicación profesional”, señala Martínez. 

También alerta sobre sus posibles efectos adversos: en personas con reflujo gastroesofágico podría agravar los síntomas al relajar el esfínter esofágico inferior. “También debe evitarse en bebés o durante el embarazo sin supervisión médica”, dice.

La Nación (Argentina) / GDA. 

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*Este contenido fue reescrito con la asistencia de una inteligencia artificial, basado en la información publicada por La Nación (GDA), y contó con la revisión de la periodista y un editor.