El gobernador Ron DeSantis promulgó recientemente en Florida una ley que establece sanciones penales para extranjeros adultos no autorizados que entren o intenten entrar a este estado después de haber entrado a Estados Unidos eludiendo o evitando el examen o la inspección, como respuesta de las estrictas políticas migratorias que está aplicando el mandatario.
Se trata de la Ley SB 4-C, que, según su documento oficial disponible en el sitio web del Senado de Florida, también puede establecer sanciones penales para segundas o subsiguientes condenas y especifica que dichos extranjeros no son elegibles para ninguna citación civil u otro programa de desviación previo o posterior al arresto.
Esto quiere decir que todo adulto extranjero no autorizado que intente ingresar después de haber sido negado la admisión, excluido, deportado o expulsado, o haber salido de los Estados Unidos durante el tiempo en que una orden de exclusión, deportación o expulsión esté pendiente; recibirá la sanción.
Lo curioso es que, a pesar de que la ley esté dirigida para los extranjeros adultos, la política en Florida contra los migrantes se encuentra tan estricta que, incluso, recientemente un joven fue arrestado por el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) a pesar de haber nacido en Estados Unidos y tener ciudadanía.
El caso del joven de Florida que fue arrestado por ICE a pesar de tener ciudadanía
Bajo la Ley SB 4-C dirigida para extranjeros, según relató el sitio Florida Phoenix, un joven de 20 años que nació en Estados Unidos y es ciudadano fue arrestado por agentes de ICE a pesar de su estatus legal, lo que provocó una gran controversia y malestar en su madre.
Sebastiana Gómez-Pérez, madre del joven, lamentando el arresto de su hijo. Foto:Jackie Llanos/Florida Phoenix
Sebastiana Gómez-Pérez, madre del joven -Juan Carlos López-Gómez-, dialogó con el medio citado y expresó que siente mucha “impotencia” porque no puede “hacer nada” ante el arresto de su hijo: “Quería decirles: '¿Adónde se lo van a llevar? Es de aquí'”, declaró, y agregó entre lágrimas: “Me duele mucho. Lo siento, pero no puedo”.
El joven fue acusado de ingresar ilegalmente a Florida como "extranjero no autorizado", incluso mientras un partidario mostrada su certificado de nacimiento estadounidense en el tribunal. “Sentí una inmensa impotencia porque no podía hacer nada, y estoy desesperada por sacar a mi hijo de allí”, lamentó su madre.