Joven latina murió en EE. UU. tras ser atropellada por un conductor ebrio cuando salía de su trabajo: su familia pide justicia

hace 1 mes 57

El trágico incidente tuvo lugar el 15 de septiembre alrededor de las 12:30 de la noche. Karla Stephany Guillén Leyva, quien celebraba ese día su cumpleaños número 24, acababa de finalizar su jornada laboral en un McDonald’s en California y se dirigía a su casa cuando fue brutalmente embestida por un conductor en estado de ebriedad. 

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El responsable, identificado como José Manuel Zambrano Cruz, de 26 años y originario de Oaxaca, México, fue detenido pero liberado poco después tras pagar una fianza de 50 mil dólares.

Una vida truncada en su mejor momento

Karla Stephany había dejado su hogar en Huixtla, Chiapas, a los 12 años, en el 2012, para reunirse con su madre Yovana Guillén Leyva en Estados Unidos. Su madre había emigrado a principios del siglo buscando oportunidades laborales que no encontró en México. 

La vida de Karla se desarrolló en California, donde, a sus 18 años, contrajo matrimonio y formó una familia con dos hijos pequeños, una niña de seis años y un niño de cuatro.

El accidente ocurrió mientras Karla se encontraba en su coche estacionado. Según relató su madre, Yovana, 

"El carro estaba estacionado. Se había bajado del carro y estaba cerrando cuando la persona borracha la impactó. Ahí me la mató”. En ese momento, Karla acababa de salir del trabajo y no pudo esquivar al vehículo que la arrolló. Su madre fue informada del accidente en plena madrugada, cuando un compañero de trabajo la despertó para darle la devastadora noticia.

Impacto en la familia y la comunidad

El choque no solo afectó a Karla Stephany, sino que dos vehículos más resultaron gravemente dañados. A pesar de la gravedad del hecho, Zambrano Cruz fue liberado con una fianza y un grillete GPS con la condición de no salir de California ni de Estados Unidos.

 En la primera audiencia, un juez indicó que la investigación podría tardar entre uno o dos años en completarse, dejando a la familia de Karla con pocas respuestas y mucha frustración.

"Lo que nosotros estamos buscando es que se haga justicia más pronto, porque no puede estar libre una persona que haya hecho esto", expresó Yovana durante una conversación telefónica con 'El Universal'. 

La incertidumbre de no saber cuándo se hará justicia ha sido devastadora, no solo para Yovana, sino también para los hijos de Karla, quienes desde el día del accidente preguntan: “¿Dónde está mi madre?”.

El dolor de Yovana es palpable. “Es triste, es desgarrador saber que los niños no tienen a su mamá. Yo no tengo a mi hija. Es triste”, confiesa.

Buscando justicia

El 30 de septiembre se llevará a cabo una nueva audiencia en la Corte, pero la familia no tiene claro si Zambrano Cruz seguirá en libertad bajo las mismas condiciones. Yovana expresa su frustración ante la lentitud del proceso judicial y las razones que se le han dado. 

“Nos dicen que tenemos que esperar, que porque las cárceles en California están muy llenas y por eso están dándole a las personas que hacen daño, estos beneficios de ley, para que puedan estar libres y no pagar lo que están haciendo y eso es súper injusto”, dice la mujer.

Karla Stephany, quien soñaba con regularizar su estatus migratorio y establecerse definitivamente en Estados Unidos, tenía el deseo de convertirse en estilista y abrir su propio salón de belleza. El día de su cremación, la familia decidió conmemorar su cumpleaños número 24, recordando sus metas y sueños que quedaron inconclusos.

Su madre clama por justicia. “Lo que pido es justicia. Justicia para mi hija, para que esta persona lo vuelvan a meter a la cárcel y no salga, porque lo que hizo no fue cualquier cosa. Mató a mi hija. No debe andar libre y haciendo lo mismo. Como que no va”, concluye Yovana, con la esperanza de que las autoridades actúen con celeridad.

FREDY MARTÍN PÉREZ

El Universal (México) / GDA

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*Este contenido fue reescrito con la asistencia de una inteligencia artificial, basado en información de El Universal (GDA), y contó con la revisión de un periodista y un editor.

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