Ante la evidencia de las cifras del balance fiscal, el Gobierno Nacional tuvo que reconocer el pasado 7 de febrero que la situación fiscal del país es bastante complicada y que lo que esto supone son unos desafíos importantes hacia adelante, más aún con un déficit del Gobierno Nacional Central (GNC) que creció 2,66 puntos porcentuales el año pasado, hasta alcanzar 6,8 por ciento del producto interno bruto (PIB).
“El Ministerio de Hacienda reconoce la persistencia de riesgos fiscales, presupuestales y de liquidez”, y que el crecimiento de los ingresos este año dependerá de la recuperación del recaudo tributario y un mayor recaudo por gestión.
La deuda de la Nación, por su parte, se mantendrá en niveles del 60,6 por ciento del PIB, “ligeramente superior al 60 por ciento estimado para 2024”.
El ministro Guevara destacó la estrategia implementada por el Gobierno nacional para enfrentar las dificultades económicas del año pasado y mencionó, por ejemplo, el recorte presupuestal por 28,4 billones y la rigurosidad con la que se manejaron los recursos de la Tesorería, lo que permitió mitigar el crecimiento del déficit fiscal.
“Esta cifra cumple con la ley de la regla fiscal e incorpora una serie de transacciones de única vez (TUV) aprobadas por el Consejo Superior de Política Fiscal (Confis), las cuales fueron conocidas anticipadamente por el Comité Autónomo de la Regla Fiscal (Carf)”, destacó.
Ministro de Hacienda, Diego Guevara. Foto:Banco de la República
Sin embargo, las cuentas del Gobierno Nacional, que apuntan a un crecimiento de 1,8 por ciento de la economía en el 2024 y una reducción de 1,99 por ciento del PIB del déficit de cuenta corriente, debido al bajo dinamismo de las importaciones y a una mayor entrada de remesas al país, entre otras cifras dadas a conocer, no les terminan de cuadrar a varios analistas y economistas.
Para Jackeline Piraján, economista principal de Scotiabank Colpatria, el deterioro del déficit fiscal, mayor que el esperado, se debió a una caída de los ingresos cercana al 0,8 por ciento del PIB, lo que sugiere que “pese a que la economía creció casi en línea con lo previsto, esto no se tradujo en un mayor recaudo fiscal, una cuestión clave para el mediano plazo”.
Sede de la Dian. Foto:DIAN
Y agregó que, por el lado del gasto, se evidenciaron inflexibilidades que llevaron a su aumento, no obstante los esfuerzos del Gobierno Nacional por realizar recortes presupuestales (28,4 billones de pesos), al tiempo que es evidente el elevado costo de la deuda que enfrenta Colombia.
A pesar de lo ajustado con que cierran las cifras del 2024, el ministro de Hacienda afirmó que el déficit del GNC para el presente año está proyectado en 5,1 por ciento del PIB, mientras la economía podría avanzar un 2,6 por ciento, “impulsada principalmente por el fortalecimiento de la demanda interna y el dinamismo de las exportaciones no tradicionales”.
En concepto de la economista del Scotiabank Colpatria, esa estimación de déficit fiscal resulta aún considerable, pues opina que “existen riesgos en los ingresos fiscales para 2025, lo que podría requerir nuevos recortes del gasto y un mayor esfuerzo por mantener el balance presupuestal”.
Y agrega: “Colombia sigue enfrentando desafíos fiscales importantes, y el costo de la deuda podría permanecer elevado, considerando que al Gobierno aún le resulta complejo encontrar el equilibrio entre ingresos y gastos, con estimaciones de ingreso que podrían ser demasiado optimistas frente a la realidad económica del país”.
Paciencia con límites
A los analistas de Fedesarrollo tampoco les cuadran bien las estimaciones del Gobierno. No creen que se haya cumplido con la regla fiscal, como lo anunció el ministro Guevara el viernes, y menos argumentando que la caída observada de los ingresos, de cerca del 1,5 por ciento del PIB es transitoria, cuando eso no es así, al menos en su totalidad.
“El Gobierno está haciendo cuentas de recaudo sobre una base inflada, que no existe. En este sentido, desde @Fedesarrollo consideramos que el Gobierno no cumplió la regla fiscal en 2024, y es muy probable que el comité de la regla fiscal diga lo mismo”, señaló Luis Fernando Mejía, director del centro de estudios económicos, a través de su cuenta de X.
El Gobierno está haciendo cuentas de recaudo sobre una base inflada, que no existe.
Luis Fernando MejíaDirector de Fedesarrollo
De acuerdo con el economista, es muy probable que los mercados ya hayan descontado esa situación; no obstante, advirtió que estos seguirán muy atentos “a la evolución del déficit en 2025. Si el Gobierno no recorta el presupuesto en otros 28 billones de pesos, la regla fiscal tampoco se cumplirá este año. Los mercados tienen paciencia, pero esa paciencia tiene sus límites. Es urgente resolver el grave problema fiscal que aqueja al país”, puntualizó.
El 5,1 por ciento del déficit fiscal estimado por el Gobierno para este 2025 del 5,1 por ciento, según el ministro de Hacienda, ya contempla un aplazamiento de gasto primario por 12 billones de pesos, luego de que se cayó la ley de financiamiento.
Deuda en récord
Frente a la deuda, Guevara manifestó que cerró el año pasado en 60 por ciento y para el 2025 se esperaría un incremento de 0,6 puntos del PIB. “En un año de choque fiscal hemos tenido que elevar nuestro nivel de deuda. Este incremento se debe al impacto de la depreciación del tipo de cambio, el deterioro del balance primario y al mayor costo financiero que enfrenta la nación”, afirmó.
Para Andrés Pardo Amézquita, exviceministro técnico de Hacienda y hoy director ejecutivo de Estrategia Macroeconómica para América Latina de XP Investments, el 60,6 por ciento que alcanzará el nivel de la deuda estimado por el Gobierno Nacional para este año es “el mismo récord que se alcanzó en el año de la pandemia (2020), pero sin que haya habido pandemia. Este aumento es totalmente responsabilidad del actual gobierno, no hay cómo echarle la culpa al anterior”, escribió el experto en su cuenta en la red social X, tras conocer las proyecciones.