El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, aseguró este lunes en una reunión especial del Gobierno por el aniversario de los ataques de Hamás que Israel se encuentra inmersa en una "guerra de resurrección para garantizar que el 7 de octubre no vuelva a suceder" y que el país está cambiando la "realidad de la seguridad" en la región.
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"Desde aquel día negro", dijo el mandatario sobre el ataque, "estamos bajo ataque en siete frentes".
El 8 de octubre, en apoyo a la población palestina, la milicia chií Hezbolá comenzó a atacar el norte de Israel desde Líbano. Con ella, paulatinamente los hutíes de Yemen, las resistencia islámica de Irak, las milicias proiraníes de Siria y, en dos ocasiones, Irán, lanzaron ataques contra el Estado hebreo.
Sumándoles las milicias palestinas de Cisjordania y a Hamás en Gaza, todos suman los siete frentes a los que alude Netanyahu.
En Cisjordania, concretamente, se ha producido una escalada de la violencia y las redadas israelíes, que ya dejan más de 400 palestinos muertos en el territorio ocupado.
Netanyahu reafirmó que Israel pondrá fin a la guerra solo cuando complete sus objetivos: acabar con Hamás, devolver a los israelíes desplazados a sus hogares -más de 60.000 en el norte y unos 15.000 en el sur-, recuperar a los 97 rehenes que siguen en Gaza y "frustrar cualquier amenaza futura" de la Franja al país.
El primer ministro participó este lunes en un acto en conmemoración de los caídos de la ciudad de Jerusalén en el ataque, donde dijo que los israelíes se levantaron como "una nación de lobos" en respuesta y que Israel está "obligado a devolver" a los rehenes.
En total, 87 ciudadanos de Jerusalén murieron en los ataques, según informó la oficina del mandatario, sin especificar cuántos eran militares y cuántos civiles.
"Nuestros héroes cayeron en defensa de la patria. Pasamos por una terrible masacre hace un año y nos levantamos como pueblo, como leones", dijo durante el acto.
"Estamos cambiando la realidad en nuestra región", aseguró, un mantra que el mandatario repite desde que Israel lanzó su ofensiva contra Gaza, que ya deja casi 42.000 muertos en un año.
El ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, dijo por otro lado que hoy, más que nunca, el país mantiene "un profundo compromiso para continuar tomando las medidas necesarias" para defender Israel.
Gallant también insistió en el deber nacional de recuperar a los rehenes, así como de apoyar a los heridos "en el cuerpo y en el alma", recordar a los caídos y mantener la lucha.
EL 7 de octubre de 2023, comandos de Hamás infiltrados desde Gaza ingresaron al sur de Israel. Utilizaron explosivos y excavadoras para traspasar la barrera que rodea el territorio palestino y mataron indiscriminadamente en kibutz, bases militares y en el sitio del festival Nova.
En total, en los ataques murieron 1.205 personas, en su mayoría civiles, según un recuento de AFP basado en cifras oficiales israelíes. Los islamistas capturaron además a 251 personas, de las cuales 97 siguen cautivas en Gaza y 34 de ellas habrían muerto, según el ejército.
Las ceremonias de conmemoración arrancaron este lunes en Reim, el lugar del festival de música Nova donde al menos 370 personas murieron, con un minuto de silencio a las 06:29 a. m., la hora exacta en la que comenzó el peor ataque de la historia reciente de Israel.
"El dolor no desaparece, al contrario, sólo se intensifica", dijo a la AFP Doron Journo, un hombre cuya hija Karin, de 23 años, murió en el acto.
El presidente israelí Isaac Herzog, que se reunió con las familias en Reim, pidió al mundo "apoyar a Israel en su lucha contra sus enemigos".
Poco después del inicio de la ceremonia, cuatro misiles fueron lanzados desde Gaza, tres de los cuales fueron interceptados y otro cayó en una zona despoblada, indicó el ejército israelí. También resonaron sirenas antiaéreas en Tel Aviv tras cohetes lanzados desde el territorio palestino. El brazo armado de Hamás reivindicó la autoría de estos disparos.
También en la ciudad de Tel Aviv, familiares de rehenes y simpatizantes se concentraron antes del amanecer para pedir el regreso de sus seres queridos, portando pancartas y carteles con sus fotografías.
Otros homenajes están convocados en otras ciudades de Israel y en todo el mundo.