Estados Unidos "rechaza categóricamente" la decisión de la Corte Penal Internacional de emitir pedidos de captura contra el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu y su exministro de Defensa Yoav Gallant, declaró la Casa Blanca este jueves.
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"Seguimos sumamente preocupados por la prisa del fiscal en emitir órdenes de detención y por los inquietantes errores de procedimiento que llevaron a esta decisión. Estados Unidos ha sido claro en que la CPI no tiene jurisdicción en este asunto", dijo un portavoz del Consejo Nacional de Seguridad.
La declaración no menciona la orden de arresto de la CPI emitida contra Mohamed Deif, el jefe militar del movimiento islamista palestino Hamás.
Mike Waltz, el futuro asesor de seguridad nacional del presidente electo de Estados Unidos Donald Trump, defendió anteriormente a Israel y prometió una "respuesta firme al sesgo antisemita de la CPI y la ONU a partir de enero", cuando el republicano asuma el cargo.
La CPI no tiene credibilidad y estas acusaciones han sido refutadas por el gobierno de Estados Unidos
"La CPI no tiene credibilidad y estas acusaciones han sido refutadas por el gobierno de Estados Unidos", dijo Waltz en la red social X.
Una posición que refleja la indignación de los republicanos, algunos de los cuales pidieron que el Senado de Estados Unidos sancione a la CPI, integrada por 124 miembros teóricamente obligados a detener a las personas sujetas a órdenes judiciales.
El tribunal con sede en La Haya informó este jueves que las órdenes de arresto contra Netanyahu y Gallant se emitieron "por crímenes contra la humanidad y crímenes de guerra cometidos desde al menos el 8 de octubre de 2023 hasta al menos el 20 de mayo de 2024".
También se emitió una orden de arresto contra Deif, quien, según Israel, murió en un ataque aéreo en Gaza en julio. Hamás no ha confirmado su muerte.
Al contrario, el jefe de la diplomacia de la UE consideró "vinculantes" las órdenes de arresto de la CPI y afirmó que por lo tanto deben "aplicarse".
"No es una decisión política. Es una decisión de un tribunal, de un tribunal de justicia, de un tribunal de justicia internacional. Y la decisión del tribunal debe respetarse y aplicarse", declaró el diplomático europeo, Joseph Borrell, durante una visita a Ammán, la capital de Jordania.