La reconocida actriz de cine para adultos, modelo y empresaria Esperanza Gómez relató para ‘El placer de tenerte’, un pódcast de entrevistas, cómo fue su primer encuentro con el entretenimiento erótico.
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“Yo en realidad no quería ser una trabajadora dentro de esta industria, sino simplemente vivir una experiencia, una fantasía que tenía desde muy temprana edad”, fueron las primeras palabras de Esperanza en la entrevista.
Aunque ella disfrutó esa primera escena dentro del cine para adultos, no resultó ser lo que esperaba. La actriz tenía expectativas muy altas sobre lo que era grabar este tipo de contenido y, al enfrentarse con la realidad, nada fue como ella lo pensaba.
"Uno está acostumbrado a interactuar en su casa, con su pareja o con las parejas que tú interactúas y uno cree que los videos se hacen de la misma manera y no”, explicó la empresaria.
Durante la entrevista Esperanza mencionó que esto se debe a que existe una enorme diferencia entre trabajar para crear ese contenido y cómo sucede el encuentro íntimo cuando una persona se encuentra en una relación sentimental o con alguien con quien simplemente se desea tener relaciones sexuales. Todo esto surge porque “uno normalmente está trabajando y está grabando para la cámara, no para el placer personal de uno”, dijo en la entrevista.
"Me cansé demasiado, me dolía el cuerpo en las posiciones porque uno no está acostumbrado a esas posiciones, entonces el inclinar o el doblar todo el tiempo la espalda y el girar la cara y el cuerpo hacía la cámara, porque se tiene que estar mostrando las partes íntimas a la cámara pero al mismo tiempo tienes que estar mostrando tu rostro”, relató la actriz.
Tener que mantener el cuerpo ubicado de ciertas maneras durante todo el tiempo que dura la grabación, y además sentir que hay todo un equipo de producción supervisando cómo sucede cada cosa, es lo que hizo la experiencia más incómoda que placentera para ella.
¿Cómo fue el inicio en la industria del cine para adultos para Esperanza Gómez?
La actriz intentó iniciar en la creación de cine para adultos en algunas compañías en Los Ángeles, pero no fue tan fácil como ella esperaba.
A pesar de ser “una niña muy linda” para esa época, la rechazaron muchas veces por su timidez frente a la cámara. “La desnudez de la parte de abajo me friqueaba, me daba mucha inseguridad”, explicó Esperanza durante la entrevista.
Otra de las trabas que tuvo la empresaria para poder ingresar a esa industria fue su bajo nivel de inglés en el momento. “Yo no entendía literal nada”, relató la actriz. Sin embargo, uno de los productores le dijo que se regresara a Colombia a estudiar el idioma para que pudiera entender las instrucciones y que practicara con su esposo.
Esto hizo que al volver al país latinoamericano su pareja la llevara a ser matriculada en un instituto para aprender inglés. Con la ayuda de una cámara profesional, Esperanza soltó su incomodidad al tener relaciones sexuales mientras la grababan.
Después de todo esto fue que la actriz pudo grabar su primera escena, que aunque no fue lo que ella esperaba y de alguna manera “mató” la fantasía que tenía en mente, le dio la fama que tiene hoy en día.
Esa primera película protagonizada por Esperanza fue tan famosa que ganó lo que sería el premio Óscar en la industria del cine para adultos.
ERIKA LUCIA IBAÑEZ GARCIA
REDACCIÓN ALCANCE DIGITAL
EL TIEMPO