La muerte de las hermanas Rayane Alves Porto, de 25 años, y Rithiele Alves Porto, de 28, impactó profundamente a la comunidad de Porto Esperidião, ubicada a 358 km de Cuiabá, este sábado 14 de septiembre.
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Ambas hermanas provenían de una familia circense y eran descritas como personas muy alegres, según comentó un tío que prefirió no revelar su identidad.
"¡Nacieron en el circo! Su padre y su abuelo eran dueños de un pequeño circo. Tras la muerte del abuelo, la pandemia obligó al cierre del circo, lo que afectó profundamente a la familia, ya que contaban con una estructura fantástica pero no pudieron continuar trabajando", relató el tío.
Después del cierre del circo, Rayane y Rithiele se mudaron junto a su abuela paterna en Indiavaí. Hace aproximadamente dos años se trasladaron a Porto Esperidião para estar cerca de su abuelo materno, quien vivía en Glória D'Oeste.
Fue en esta ciudad donde las hermanas fueron enterradas el domingo 15, tras su trágico fallecimiento.
Rayane Alves Porto trabajaba como maquilladora, mientras que su hermana Rithiele Alves Porto era estudiante de derecho. Su tío recuerda el gran aprecio que ambas recibían en la ciudad, lo que llevó a una de ellas a postularse como candidata a concejal en las elecciones municipales.
"Fueron muy dulces. Rayane participaba en un grupo de la iglesia, muy querida por la población. La invitaron a ser candidata y ella aceptó. Era su primera vez en política, pero lamentablemente, tuvimos que convivir con esta tragedia", comentó el tío.
La familia afirmó que las hermanas nunca estuvieron vinculadas a facciones criminales y que el gesto presente en la fotografía que circulaba sobre el caso era la causa de un error en la motivación del crimen.
"¡Lo que dijeron sobre el gesto no tiene sentido! Las chicas nunca tuvieron conexión con ninguna [facción criminal]. No bebían, no fumaban, no consumían drogas. Eran chicas súper responsables, con gran madurez, dos personas íntegras, con almas maravillosas", expresó el tío con cariño.
El crimen
En redes sociales, las hermanas Rayane y Rithiele Alves Porto se declararon cristianas y mostraron su amor por el circo, una pasión que compartían desde su infancia. El jefe de la investigación señaló que el crimen se originó por una foto que las víctimas habrían tomado en el río Jauru, la cual contenía un símbolo asociado con una facción rival.
Cámaras de seguridad captaron el momento en que las hermanas, su hermano y el novio de Rittiele fueron secuestrados por los delincuentes.
Durante el secuestro, los criminales exigían dinero a las víctimas a cambio de no matarlas. Uno de los jóvenes logró escapar y llegar a la comisaría. Según la familia, el hermano de las víctimas se encuentra hospitalizado, pero en condición estable.
El día del crimen, 10 personas fueron detenidas, aunque un adolescente fue liberado por falta de pruebas. El domingo 15, un undécimo sospechoso fue arrestado, quien debe enfrentar una audiencia de custodia.
El lunes 16, la Secretaría de Estado de Seguridad Pública (Sesp) aisló al detenido sospechoso de haber ordenado la muerte de las hermanas. Según la Policía, Higo Rafael, este criminal estuvo en una videollamada por alrededor de tres horas con los autores del crimen, coordinando las torturas desde el interior de la Penitenciaría Central Estatal (PCE) en Cuiabá.
Se abrió una investigación administrativa para examinar cómo se permitió el acceso a teléfonos móviles dentro de la prisión.
La Justicia de Mato Grosso convirtió en prisión preventiva la detención de cuatro sospechosos del asesinato de Rayane y Rithiele, y ordenó el internamiento de cinco adolescentes en unidades socioeducativas por su presunta implicación en el caso.
La policía continúa investigando para identificar a otras personas que puedan haber participado en el crimen.
Jardes Johnson y Sofia Pontes.
G1.
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*Este contenido fue escrito con la asistencia de una inteligencia artificial, basada en información de O Globo Brasil (GDA). Contó con la revisión de un periodista y un editor.