El icónico juego móvil Flappy Bird, que revolucionó la industria hace una 10 años, está de vuelta en el mercado. Sin embargo, el anuncio de su relanzamiento ha generado gran emoción entre los jugadores nostálgicos, pero también ha desatado una tormenta de críticas por parte de su creador, el vietnamita Dong Nguyen.
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Esto se dio mientras miles de fanáticos celebraban la noticia del regreso del videojuego pero Nguyen realizó algunas declaraciones y le indicó al público, por medio de sus redes sociales, que no tiene ningún tipo de vínculo con esta nueva versión.
No obstante, el entusiasmo por el regreso del pájaro volador ha sido ensombrecido por las declaraciones de Nguyen. El desarrollador reapareció en redes sociales tras varios años de silencio para aclarar que no tiene relación alguna con este relanzamiento. "No, no tengo ninguna relación con su juego. No vendí nada. Y tampoco apoyo las criptomonedas", escribió, refiriéndose a los rumores sobre la posible inclusión de criptomonedas en el nuevo Flappy Bird.
Ahora bien, el resurgimiento de Flappy Bird está liderado por la empresa Flappy Bird Foundation, que es un grupo de seguidores que adquirió los derechos del juego tras su inactividad prolongada.
Su lanzamiento está previsto para octubre de 2024 e incluye nuevas características como un modo battle royale, personajes desbloqueables, y una expansión a plataformas móviles y navegadores web.
Y es que la controversia gira en torno a cómo los derechos del juego cambiaron de manos. Según registros de la Oficina de Patentes de Estados Unidos, la empresa Gametech Holdings LLC reclamó la marca de Flappy Bird debido a su desuso, una jugada que, aunque legal, tiene a los seguidores más leales al creador original un tanto disgustados,
Cabe resaltar que Nguyen había retirado el juego en 2014, citando el impacto negativo que la adicción de los jugadores había tenido en su vida personal. A pesar de su éxito, que se vio reflejado ya que se tenían ingresos diarios de 50,000 dólares, el desarrollador decidió cerrarlo definitivamente. Hasta que ahora se dio el inesperado regreso, sin su consentimiento.
A medida que la fecha de lanzamiento se acerca, la pregunta es si este nuevo Flappy Bird logrará capturar la magia del original o si la falta de respaldo de su creador y las sospechas de criptomonedas empañarán su regreso.
Lo que está claro es que, una vez más, el sencillo juego de un pájaro atravesando tuberías vuelve a estar en el centro de la atención mundial.