El gran error que muchos cometen al cepillar los dientes y que hace que se les pongan amarillos: tiene que ver con el agua

Cepillarse los dientes es fundamental para mantener una boca limpia y saludable, además de protegerlos contra caries y enfermedades bucales. Sin embargo, aunque muchos creen que su técnica es la correcta, cometen un error común que podría causar el efecto contrario: el tono amarillento en el esmalte. 

Según especialistas, la manera en que se utiliza el agua durante el lavado juega un papel importante en este problema, y hacerlo de forma incorrecta puede afectar la apariencia de los dientes a largo plazo.

La importancia de mojar las cerdas del cepillo

La primera recomendación de los especialistas es acudir a un dentista para recibir orientación sobre el tipo de cepillo más adecuado según las necesidades de cada persona, lo cual previene daños en el esmalte dental. 

Una vez elegido, los expertos insisten en que es fundamental mojar bien las cerdas antes de aplicar el dentífrico. 

“Cepillarse los dientes de determinadas maneras, como sin agua o justo después de comer alimentos ácidos, podría hacer que se vean menos blancos con el tiempo”, explicó el odontólogo Ferakh Hamid en declaraciones a 'Daily Mail'. 

El tono amarillento en los dientes, contrario a lo que muchos piensan, no siempre se debe a una falta de cepillado. Hamid explicó que mojar las cerdas del cepillo antes de cepillarse facilita una mejor aplicación de la pasta. “El cepillado en seco puede parecer bueno para eliminar las manchas superficiales, pero sin agua, la pasta de dientes no se esparce bien”, comentó. 

Cuidar el esmalte dental tras el consumo de alimentos ácidos

Además, el doctor Hamid destacó que mojar las cerdas ayuda a suavizar el contacto del cepillo con las encías y los dientes, lo cual es esencial para evitar irritaciones. “Esto significa que al cepillarte los dientes lo haces de manera más suave con tus encías y dientes, lo que ayuda a evitar cualquier irritación o daño”, detalló el especialista.

Sumado a las recomendaciones, el doctor Ezzard Rolle, de la Universidad de Columbia, explicó que después de consumir alimentos ácidos, el esmalte dental queda más vulnerable. “La razón de esto es que cuando los ácidos están en la boca, debilitan el esmalte del diente, que es la capa externa del diente. Después de comer o beber algo ácido, siempre recomiendo enjuagarse o beber agua, lo que inicia el proceso de remineralización del esmalte”, aclaró Rolle.

El hábito correcto para una salud bucal óptima

Rolle agregó que, aunque lo ideal sería cepillarse los dientes después de cada comida, para muchos no es realista debido a sus ocupadas agendas. “Lo ideal sería cepillarse los dientes y usar hilo dental después de cada comida, pero eso puede no ser muy realista para personas con trabajos de muchas horas o con agendas atestadas de compromisos. Por eso recomendamos cepillarse los dientes y usar hilo dental al menos dos veces al día, y lo ideal es que uno de esos momentos sea antes de acostarse”, precisó el experto.

Los especialistas coinciden en que el gran error radica en cepillarse los dientes sin mojar previamente el cepillo. Al adoptar este sencillo hábito, se pueden prevenir daños y mantener una apariencia más blanca y saludable en los dientes.

La Nación (Argentina) / GDA

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*Este contenido fue reescrito con la asistencia de una inteligencia artificial, basado en información de La Nación (GDA), y contó con la revisión de un periodista y un editor.