La continuidad del proyecto Autopistas del Caribe, que desde 2021 está al frente de la modernización de la infraestructura vial de Bolívar y Atlántico, podría verse interrumpida ante la posibilidad de una terminación anticipada del contrato.
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Esta situación amenaza, según la concesionaria Autopista del Caribe, con detener los avances logrados en los últimos tres años y revertir el impacto positivo en la región, lo que generaría serias consecuencias para la conectividad, la economía local y el bienestar de las comunidades.
En caso de que el contrato finalice antes de lo previsto, se interrumpirían los trabajos de mantenimiento en los 253 kilómetros de vías intervenidas, lo que aceleraría el deterioro de las condiciones del corredor vial Cartagena-Barranquilla y comprometería la seguridad de los usuarios.
Además, asegura el operador de la vía, más de 1.800 empleos directos e indirectos se perderían, afectando a cientos de familias que dependen de este proyecto.
También se verían afectados los contratos con proveedores y contratistas locales, generando un impacto en la economía regional.
Además, Autopistas del Caribe advierte que los programas sociales y ambientales implementados a lo largo del corredor, como el fortalecimiento de asociaciones comunitarias y las campañas de sensibilización en seguridad vial, quedarían suspendidos, dejando a las comunidades sin el apoyo que han recibido durante los últimos años.
La concesión Autopistas del Caribe ha pedido el respaldo de las autoridades y de la ciudadanía para evitar la terminación anticipada del contrato, destacando que esta infraestructura es esencial para la competitividad regional y el desarrollo económico de Bolívar y Atlántico.