La Comisión VII de Senado empieza a encender sus motores de cara a la discusión de uno de los proyectos fundamentales del gobierno del presidente Gustavo Petro: la reforma laboral. La iniciativa, que si no está aprobada el 20 de junio se hundirá por falta de trámite, tendrá que sortear el intento de archivo en la misma célula que hundió la primera versión de la reforma de la salud hace casi un año.
Todo está previsto para que esta semana se radique una ponencia negativa de la mano del senador liberal Miguel Ángel Pinto. Se comenta, además, que se podría presentar una alternativa.
El senador liberal Miguel Ángel Pinto. Foto:Comisión VII Senado
El tercer debate de esta reforma, que arrancaría la próxima semana, será una prueba de fuego para el ministro del Interior, Armando Benedetti, y el del Trabajo, Antonio Sanguino, quien conoce bien el Congreso y al que el presidente Petro encomendó el trámite del proyecto tras su triunfo en la Cámara de Representantes bajo el liderazgo de la exministra Gloria Inés Ramírez.
El panorama
Y el panorama, de antemano, se presenta adverso para el Ejecutivo en la célula que preside la conservadora Nadia Blel, ya que los votos pro-Gobierno solo podrán llegar a cinco, algo insuficiente si se mantiene el bloque de ocho senadores en contra. Honorio Henríquez (Centro Democrático), Alirio Barrera (Centro Democrático), Esperanza Andrade (Partido Conservador) y Lorena Ríos (Colombia Justa Libres), Miguel Ángel Pinto (Partido Liberal), Berenice Bedoya (ASI), Norma Hurtado (‘la U’) y Ana Paola Agudelo (Mira).
Aunque está en contra de la reforma, Nadia Blel aseguró que dará garantías en el debate, Foto:Comisión VII Senado
Así las cosas, los votos cristianos serán determinantes. Es decir, los ministros Benedetti y Sanguino apuntarían a disputar los votos de Ríos y Agudelo. También entraría en esta puja el voto de Bedoya. El exministro del Interior Juan Fernando Cristo se venía moviendo para buscar los votos cristianos (Ríos y Agudelo), lo que prácticamente le habría dado la victoria. Pero finalmente esos apoyos no se concretaron y, sin Cristo, habría que empezar de cero. En caso de que el oficialismo recupere terreno, la oposición recurriría a la estrategia de dilatar el debate.
Antonio Sanguino, ministro de Trabajo. Foto:Presidencia
Mientras tanto, la senadora del Pacto Histórico Martha Peralta, que integra igualmente la comisión, convocó una mesa técnica para hoy a las 10 de la mañana a fin de discutir la iniciativa. “Vamos por recargo del 100 % de las horas extras, jornadas laborales justas, jornadas flexibles para trabajadores/as con responsabilidades familiares del cuidado y más”, manifestó ayer.
Lo que pase en las próximas dos semanas marcará no solo el rumbo de la reforma laboral, sino el de la salud, que deberá regresar a la célula donde la Casa de Nariño sufrió su peor derrota legislativa.
JUAN PABLO PENAGOS RAMÍREZ
Redacción Política