Un colombiano procesado en España por el asesinato de su expareja -también de nacionalidad colombiana- admitió este miércoles que asfixió a la mujer cuando esta estaba de espaldas, la decapitó y descuartizó, y luego arrojó sus restos al mar en enero 2023. Un caso por el que la fiscalía pide ahora 25 años de prisión en su contra.
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El acusado confeso, juzgado desde este miércoles en la Audiencia Provincial de Málaga (España), reconoció que hizo una herida en el abdomen de la víctima para conseguir que el cuerpo se hundiera en el agua.
Esto es lo que se sabe del caso y lo que dijo el acusado en la audiencia.
El hallazgo del cuerpo de la colombiana en España
La colombiana asesinada fue identificada como Natalia Mosquera, de 46 años y enfermera de profesión. Según le contó su familia a Telemundo, la mujer se había mudado a Europa buscando mejores oportunidades.
“Trabajaba como enfermera cuidando una pareja de ancianos y estaba pagando la carrera universitaria de uno de sus hijos”, le contó una sobrina al diario citado.
Parte de los restos de la colombiana aparecieron el 8 de enero de 2023 en una playa de Marbella, famosa localidad turística de la provincia de Málaga.
El cadáver apareció decapitado, sin manos y con una gran incisión en el abdomen, que según el fiscal del caso hizo el acusado para conseguir que el cuerpo desapareciera bajo el agua y evitar que la víctima pudiera ser identificada.
Para identificar el cuerpo, las autoridades recurrieron a pruebas de ADN con los familiares de la víctima. También se hizo un cotejo de las huellas cuando se logró rescatar las manos de la víctima, que fueron localizadas en enero de 2023 en otra playa de Marbella.
El acusado, identificado como Leonel H., mantuvo una relación sentimental con la mujer durante siete meses.
Según el diario español El Mundo, la mujer decidió poner fin a la relación a finales de noviembre de 2022 y luego interpuso una denuncia contra el hombre ante la comisaría por malos tratos.
"El pasado mes de diciembre (2022) el presunto asesino recibió una sentencia condenatoria por la comisión de un delito de malos tratos sobre su pareja. La sentencia fue dictada por el Juzgado de Violencia de Marbella y consistió en una condena a seis meses de prisión y otros 16 meses de prohibición de comunicación y aproximación a la víctima. La condena de prisión fue suspendida por un período de dos años con el acuerdo de la fiscalía", señala el diario citado.
Días antes del homicidio, la mujer había recibido amenazas por teléfono del hombre. El día en que aparecieron los restos en el mar, de hecho, sus familiares denunciaron la desaparición y advirtieron que era víctima de violencia machista.
Lo que dijo el acusado en la audiencia este miércoles
En la audiencia de este miércoles, el acusado argumentó que cometió el crimen sin premeditación.
"Yo no lo planeé, no tenía nada previsto, fue algo momentáneo, un impulso", aseguró a preguntas del fiscal, que solicita 25 años de prisión por el delito de asesinato con el agravante de parentesco.
También pidió nueve meses de prisión por quebrantamiento de condena, ya que el acusado tenía en vigor una orden de prohibición de acercarse o comunicarse por cualquier medio con la mujer.
Al ser interrogado por su abogado, el hombre, de 45 años, dijo que está arrepentido. Durante la audiencia, el acusado también consultó varias veces a su abogado antes de contestar sobre cómo cometió los hechos.
Según explicó al responder al jurado popular que lo que juzga, llevaba un cúter cuando fue a ver a la mujer porque es instalador de pladur (material de construcción compuesto de placas de yeso) y para él no es un arma, sino una herramienta de trabajo.
Luego, cometió el crimen contra la también colombiana.