Perseverancia, esta es la palabra que define a Nico Hernández, quién por casi 10 años de carrera se ha mantenido en pie y promete traer más sorpresas no solo para la música regional, sino para la industria. “Esa virtud en los momentos más difíciles fue la que me ayudó a continuar”, comenta.
Este espíritu se materializa en su nuevo álbum, ‘Lo más importante es el amor’, el tercero hasta el momento. Desde su infancia, cuando participó en La Voz Kids en 2015, Nico no ha dejado de trabajar para alcanzar sus metas. Su dedicación se refleja en cada pieza de este lanzamiento, especialmente en ‘Gracias a Dios’, que habla de una historia de agradecimiento hacia todo lo que ha vivido y el resultado obtenido de su dedicación, disciplina y, sobre todo, del amor que le tiene a su carrera, a su familia y a la música.
El joven, de tan solo 24 años, no solo demuestra su talento en el escenario, sino también en la composición, otro gran factor que lo hace relucir en la industria. Sus letras han conquistado los corazones de quienes lo siguen, incluso, de las personas que llegan a escucharlo por primera vez, transmitiendo el mensaje central de su álbum: el amor. Cada melodía de 'Lo más importante es el amor' es un testimonio de la pasión y el agradecimiento del artista por sus logros.
Este camino recorrido está dando sus frutos y quedó demostrado la noche del 6 de marzo, en la que Nico presentó su álbum en casa Spotify (Bogotá), acompañado de sus fans, familia y amigos más cercanos. Además del conmovedor momento que vivió en el escenario cuando recibió un disco de platino “recuerdo que cuando tenía unos 8 años, llevaba una semana escuchando reggaetón con unos audífonos que me habían regalado y le dije a mi papá -quiero ser reguetonero- y me dijo - pues usted va a ser el mejor-”, y aunque en esta historia no se dedicó a ese género, se puede decir que su sueño de niño se está cumpliendo en la música regional que, como bien dice, la seguirá escogiendo por mucho tiempo.
Hablemos sobre ‘Lo más importante es el amor’...
Es un disco en el cual cada canción se ha trabajado con cuidado, con cautelo, para escogerla, escribirla, producirla. Es una propuesta bien diferente. Y parte de un movimiento que tenemos que se llama Musari, es una forma de hacer música, rompiendo las reglas, fusionando géneros y poniendo mensajes positivos. Este disco es una muestra de eso, entonces creo que es el picantico que tiene. Por supuesto, referencias regionales, pero también referencias pop, urbanas, de folclore colombiano. Es una explosión de sonidos bien diferente.
¿Cómo es esta fusión entre la música regional y la música urbana?
Ha sido una tarea maravillosa combinar estos dos géneros. Por supuesto, no diría que nuestra canción es una combinación entre el reggaetón y la regional. Más bien diría que es un resultado de esa esencia norteña que tengo y esa esencia urbana de Juan Duque. Es algo que suena muy diferente, muy fresco, muy juvenil y muy chévere. Tengo muchas ganas de que todos la puedan escuchar.
Hablemos sobre una de las canciones del álbum, ‘Hasta Aquí Nos Trajo el Río’...
Hasta aquí nos trajo el río es una canción bien especial. Primero por la letra, me encanta el mensaje que tiene, porque está escrita para despedirse, pero despedirse con amor, con gratitud, de una manera diferente. Creo que durante años, en la sociedad hemos visto como ejemplos de terminar las relaciones, pero de manera muy fuerte, como a través del dolor. Y esta canción me encanta porque propone algo súper diferente, propone despedirse, pero diciéndole a la otra persona, gracias por todo lo que vivimos, te quiero recordar por lo bonito y te quiero.
¿De dónde surge toda esta inspiración para crear este tipo de canciones?
Pues mira que en este momento de mi vida no estoy viviendo ninguna ruptura, pero he vivido rupturas amorosas, de amistades, he dejado de trabajar con personas que quería mucho. Entonces, realmente la escribí inspirado en eso, en aquellas personas que ya no hacen parte de mi vida, pero que en algún momento lo hicieron y que me enseñaron mucho, personas de las cuales aprendí, que amé.
¿Qué ve en la música regional?
La verdad la música regional me encanta, siento que está en mis raíces, en mis venas, en lo que soy como colombiano. A pesar de que no crecí con esto. Pero amo a mi país, amo mis raíces y ahí descubrí, en las raíces de mi país, la música popular. Entonces es algo que he adoptado a mi manera, mi estilo, con respeto, con amor y me lo gozo. Seguiré escogiendo la música regional por mucho tiempo.
¿Cómo fue el momento en el que decidió empezar en esta industria? Por ejemplo, cuando vendía canciones.
Retador, pero muy chévere, de verdad que maravilloso diría yo. Y hoy en día mucho más. Yo creo que desde jovencito he sido arriesgado, en el mejor de los sentidos, arriesgado a hacer cosas diferentes, hacer cosas nuevas, a ir por mis sueños, a quien no le importa el miedo a fracasar. Durante muchos años tuve ese miedo, pero nunca dejé que estuviera por encima de las ganas de salir adelante. Así que cuando empecé a escribir canciones, vi que era una oportunidad para crecer económicamente, para sostener mis gastos y me lo disfruté, hoy en día sigo escribiendo canciones, ya no las vendo, pero las grabo.
¿Tiene alguna anécdota en la que haya estado seguro de que la música era la mejor decisión?
Sí. Yo siempre he tenido a la música como en las venas y en el corazón desde que nací, pero sin duda alguna, cuando estuve en la ‘Voz Kids’ en el año 2015, fue un momento que dije - wow, quiero buscar esto en mi vida, lo mío es la música-, entonces terminé el colegio de manera virtual y empecé a estudiar guitarra y a cantar todos los días. Empecé mi camino en la música.