La violencia de pareja contra las mujeres sigue siendo un problema alarmante en la región Caribe, y el Atlántico se posiciona como el departamento con mayor incidencia.
De acuerdo con el Sistema Médico Legal Colombiano, en 2022 se registraron 4.999 casos en los departamentos de Atlántico, Magdalena, Bolívar, Sucre, La Guajira y San Andrés y Providencia, de los cuales 1.858 ocurrieron en territorio atlanticense, lo que representa el 37,17 % del total en la región.
Dentro del Atlántico, Barranquilla concentra la mayor cantidad de víctimas con 1.101 casos, es decir, el 59,26 % del total departamental. Otros municipios como Soledad (450 casos), Malambo (83), Baranoa (63) y Sabanalarga (33) también presentan cifras preocupantes, aunque en menor medida.
Estas estadísticas evidencian la urgencia de implementar medidas más efectivas para combatir esta problemática, especialmente en las zonas urbanas más densamente pobladas.
Comparativamente, Magdalena y Bolívar ocupan el segundo y tercer lugar en la región, con 1.039 casos (20,78 %) y 1.116 casos (22,32 %), respectivamente.
Sucre, La Guajira y San Andrés y Providencia presentan cifras menores, aunque igualmente significativas, que muestran cómo la violencia de género afecta a toda la región Caribe sin distinción de territorio.
A pesar de los esfuerzos institucionales por atender y prevenir estos casos, las estadísticas reflejan un desafío persistente en términos de justicia, protección y atención integral para las víctimas. Las políticas actuales deben fortalecer tanto la denuncia como el acceso a recursos para las mujeres en situación de violencia.
Violencia contra la mujer. Foto:iStock
Barranquilla y su desafío estructural
Barranquilla, como epicentro del problema en el Atlántico, enfrenta un reto adicional debido a la magnitud de su población y las dinámicas sociales que inciden en la violencia de pareja.
Los altos índices en la capital departamental sugieren la necesidad de intervenciones específicas que incluyan campañas masivas de prevención, sensibilización comunitaria y mejoras en las rutas de atención a víctimas.
Por su parte, municipios como Soledad y Malambo también muestran patrones preocupantes que exigen atención prioritaria. La densidad poblacional y las condiciones económicas y sociales de estas áreas podrían ser factores determinantes en el aumento de los casos, lo que subraya la importancia de desarrollar estrategias localizadas.
Abordar la violencia de género en el Atlántico requiere un enfoque integral que combine acciones inmediatas con cambios estructurales a largo plazo. Esto incluye la implementación de políticas públicas más efectivas, el fortalecimiento de la educación en igualdad de género y la creación de entornos seguros para que las mujeres puedan denunciar sin miedo.
La transformación cultural en la región Caribe es clave para erradicar la violencia de pareja y garantizar un futuro en el que ninguna mujer sea víctima de abuso.
Mientras tanto, las cifras continúan siendo un llamado de atención para la sociedad en general y las autoridades en particular.
Abordar la violencia de género en el Atlántico requiere un enfoque integral que combine acciones. Foto:Juan Pablo Rueda. Archivo EL TIEMPO
Patrulla Púrpura en casos de violencia contra la mujer en el Atántico
Con el fin de prevenir y contrarrestar toda forma de violencia contra la mujer, este lunes se dio a conocer la estrategia 'Patrulla Púrpura' en el Atlántico.
La Patrulla Púrpura estará recorriendo el departamento, con el apoyo de 18 mujeres policías capacitadas, para atender cualquier tipo de denuncia o hecho que afecte la vida e integridad de las ciudadanas en los municipios.
Para contrarrestar los diferentes delitos relacionados con la violencia de género o violencia contra la mujer, las uniformadas realizarán actividades de inteligencia e investigación criminal, con el ánimo de conocer a profundidad el fenómeno y capturar a los delincuentes.