El operativo secreto del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE, por sus siglas en inglés) para cazar fugitivos en EE. UU. se hizo más sofisticado y efectivo a lo largo de los años, empleando estrategias que hasta ahora eran desconocidas para el público.
Su principal objetivo es localizar, arrestar y deportar a extranjeros que representan una amenaza para la seguridad pública de EE. UU. , incluyendo pandilleros, delincuentes sexuales y aquellos con antecedentes violentos. Con más de 445.000 arrestos hasta la fecha, esta iniciativa demostró ser clave en los esfuerzos de la entidad para reducir la población de fugitivos extranjeros.
Sin embargo, uno de los aspectos menos conocidos de este operativo son las artimañas utilizadas por los agentes para infiltrarse en los domicilios sin necesidad de una orden judicial.
De acuerdo a Immigrant Defense Project, estas tácticas consisten en que los agentes se hagan pasar por otras autoridades o entidades, engañando a las personas sobre su identidad y el propósito de su visita.
Esta práctica permite a los agentes obtener acceso a las viviendas y proceder con el arresto sin que los sujetos de la investigación sepan que están siendo objetivos de ICE.
La entidad utiliza estas artimañas para eludir las restricciones de la Cuarta Enmienda, que protege contra registros e incautaciones sin orden judicial. Dado que los agentes rara vez tienen órdenes judiciales, dependen del consentimiento de las personas para ingresar a sus hogares.
Sin embargo, al mentir sobre su identidad, como hacerse pasar por agentes locales de policía, consigue que las personas abran las puertas sin saber que están siendo investigadas por inmigración.
ICE está deportando a miles de migrantes en los últimos meses Foto:Istock
Aunque esta táctica fue parte del protocolo de entrenamiento de ICE desde hace años, su uso se intensificó desde 2017, lo que generó una preocupación sobre los derechos civiles de los inmigrantes en EE. UU.
Por otro lado, la Operación Cross Check, que es una de las estrategias más destacadas de este operativo, busca identificar y arrestar a los fugitivos más peligrosos, aquellos con condenas por delitos violentos o que son parte de organizaciones criminales.
Durante estas operaciones, los agentes recorren vecindarios, realizando arrestos sorpresa que a menudo dejan a las comunidades en un estado de alerta constante.
A pesar de las críticas y las demandas en contra de estas tácticas, ICE defiende su enfoque al argumentar que las artimañas son una herramienta esencial para controlar el lugar y el momento de los arrestos, minimizando el riesgo para los oficiales y los detenidos.
Sin embargo, la controversia persiste, y muchos defienden que estas prácticas violan los derechos fundamentales de los ciudadanos y residentes.