Advierten por empleos que podrían perderse en Estados Unidos

Aunque actualmente los migrantes en Estados Unidos se desempeñan en todo tipo de tareas y sectores, uno de los que más empleos ha dado a los extranjeros en busca de una oportunidad en el país latinoamericano es el de la agricultura. Pero, con la adopción de cada vez más tecnologías, hay importantes riesgos.

Buscando no solo ahorrar costos en mano de obra sino tener los mejores sistemas para garantizar que los cultivos tengan los mejores rendimientos, cada vez más empresas agrícolas en Estados Unidos están empleando tecnología.

Por ejemplo, en grandes sembradíos de Florida, ya pueden verse los impactos del uso de tecnología. Hay tractores sin conductor que recorren hectáreas de maíz, soja, lechugas y otros cultivos.

Y en lugares como la Universidad Estatal de Misisipi, de acuerdo con el medio CBS News, se está desarrollando un brazo robótico capaz de reconocer objetos y moverse de manera tan precisa y delicada que incluso podría recolectar bayas.

A pesar del panorama, vale la pena resaltar que varios agricultores aseguran que están teniendo problemas para encontrar mano de obra, por lo que la tecnología no necesariamente está arrebatando trabajo que los humanos quieren hacer.

Una de las razones de ello es que el cambio climático está ocasionando fuertes retos para el sector y obliga a las personas a pasar más tiempo en actividades bajo un intenso calor.

Pequeños productores agricultores de Estados Unidos no confían en la automatización

Aunque ya se están viendo los primeros pasos de la automatización en la agricultura con la intención de tener mayor precisión en los tiempos de siembra, cosecha y explotación de los cultivos en Estados Unidos, los pequeños productores no creen que sea la solución.

Según consignó CBS News, los agricultores de menor escala consideran que la adopción de tecnología no solo está fuera de su alcance por los elevados precios, sino porque creen que las herramientas automatizadas no realizarán una mejor labor que los trabajadores.

Por ejemplo, los tractores sin conductor son fáciles de automatizar, pero únicamente para los cultivos en hileras. La cosecha de frutas pequeñas, no uniformes y que se dañan fácilmente, como las moras o los cítricos, requieren más fuerza y destreza.

Además, quienes ya utilizan este tipo de máquinas se han quejado de que en ocasiones llegan a atascarse, requieren mantenimiento especializado y supervisión humana para funcionar correctamente.

Por otra parte también hay quienes opinan que una mayor automatización ocasionará que los migrantes no aboguen por sus derechos, por miedo a ser reemplazados.