Constantemente las autoridades piden a los padres y tutores poner atención al contenido y las aplicaciones a las que los menores tienen acceso pues un contacto en un app de citas podría terminar en una verdadera tragedia tal cual le sucedió a Miranda Corsette, de 16 años, en Florida.
El Departamento de Policía de St. Petersburg dio a conocer el caso de la menor que, tras haberse puesto en contacto con una pareja a través de una aplicación de citas, fue reportada como desaparecida y, días después, encontrada desmembrada en un contenedor de basura.
De acuerdo con los detalles, el sospechoso, quien ya fue detenido, Steven Gress, conoció a Corsette en una plataforma de citas y se encontraron en persona el pasado 14 de febrero. Se reunieron en un par de ocasiones y no hubo signos de violencia.
Sin embargo, posteriormente la adolescente se encontró con Gress y su pareja Michelle Brandes con quienes, según las investigaciones, tuvo una discusión debido a unas joyas faltantes.
La menor de 16 años fue golpeada y torturada debido a que la pareja no podía encontrar ciertas piezas de joyería. El jefe de policía de St. Petersburg, Anthony Holloway, le dijo al medio CBS News que creen Corsette fue asesinada entre el 20 y el 24 de febrero.
Tras el asesinato, se especula que Gress llevó el cuerpo de la menor hasta una casa ubicada en Largo, Florida, en donde lo desmembró y luego lo llevó al condado de Hillsborough para tirarlo en un contenedor de basura donde los detectives lo hallaron.
El 5 de marzo la policía arrestó a Gress por apuntar con un arpón a su pareja y por posesión de drogas. Luego se le vinculó con el asesinato de Miranda Corsette.
Un par de días después, Michelle Brandes se entregó a la policía y también está acusada de asesinato por el caso de la joven de 16 años.
Los sospechosos del asesinato ya fueron detenidos. Foto:St. Petersburg Police Department
Familia de la menor desaparecida y asesinada en Florida tardó en denunciar
Mientras estaban investigando el caso, la policía de St. Petersburg descubrió que Miranda Corsette vivía en casa de su abuela, quien denunció la desaparición.
Sin embargo, la principal responsable de la menor no alertó sobre su desaparición de inmediato debido a que la adolescente, que era madre de un bebé de 11 meses, se escapaba con frecuencia.
De hecho, en una conferencia de prensa, la policía dijo que Corsette normalmente volvía a casa, por lo que su abuela no informaba de su desaparición cada vez que se iba. Pero en esta ocasión no regresó de manera oportuna, por lo que el 24 de febrero pidió ayuda a las autoridades.