En redes sociales se hizo viral Moo Deng, una bebé hipopótamo pigmeo que vive en un zoológico de Tailandia. Sus videos, en los que se destaca su personalidad energética y caótica, captaron la atención de los internautas, entre ellos Molly Swindall, una mujer que viajó solo para ver al pequeño animal en persona.
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"Estoy absolutamente enamorada de esa papa brillante y húmeda. Ella es adorable, tiene una personalidad fuerte y es un placer verla", dijo la mujer, de 30 años, a 'New York Post'.
Swindall compartió en redes sociales una serie de videos sobre su largo recorrido para poder ver a Moo Deng. La joven, oriunda de Nueva York, viajó más de 50 horas ida y vuelta solo para llegar al zoológico de Tailandia.
Su primer vuelo tardó 21 horas y, cuando llegó a aduanas, la persona encargada le preguntó cuál era el motivo de su visita y por cuánto tiempo estaría en el país.
La neoyorquina reveló que estaría 30 horas en Tailandia y solo había viajado para ver a Mood Deng.
"Les dije que Tailandia siempre había estado de primeras en mi lista y que planeaba volver por más tiempo, pero solo quería ver a Moo Deng mientras todavía fuera una bebé", comentó.
En conversación con 'New York Post', reveló que su viaje le costó alrededor de $ 1.000 dólares, un poco más de $ 4'000.000 de pesos colombianos.
"Simplemente amo a los animales y amo la aventura, por eso me propuse ir. Mi padre falleció inesperadamente hace seis años y, en ese momento, pensé: '¿Sabes qué? Siempre voy a vivir mi vida al máximo. Siempre tendré un sentido de aventura'. Y por eso decidí hacer lo que hice", dijo a 'CNN'.
Swindall pudo observar a Moo Deng de cerca y grabó varios videos de la bebé hipopótamo. Agregó que todo había valido la pena.
¿Cuál fue la siguiente parada de la mujer?
Swindall no solo viajó para ver a Moo Deng, después de Tailandia se fue a Australia para conocer a Pesto, un bebé pingüino que también se hizo viral en redes sociales.
"Sabía que tenía que ver a Moo Deng y Pesto lo antes posible, ya que ambos estaban creciendo", compartió con 'New York Post'.
Su trayecto no paró ahí, pues la estadounidense volvió a Bangkok para ver por segunda vez a Moo Deng. En esta ocasión, pudo conocer más del país.
"Fue muy triste irme, especialmente cuando me di cuenta de que la próxima vez que vea a Moo Deng, probablemente será adulta", concluyó.
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SOFÍA ARIAS MARTÍNEZ
REDACCIÓN ALCANCE DIGITAL
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