La llegada de la temporada de frío trae consigo el reto de secar la ropa, una tarea que se vuelve complicada debido a la humedad ambiental. Sin embargo, existe un truco sencillo que puede ayudarle a conseguir que sus prendas queden secas en menos tiempo, y lo mejor es que solo requiere de una toalla.
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Una solución económica para secar la ropa sin secadora
Aunque la secadora es una de las mejores opciones para secar la ropa sin importar el clima, muchas personas no cuentan con este aparato en casa. Afortunadamente, el uso de una toalla en la lavadora puede ser una alternativa eficaz y económica para eliminar la humedad de las prendas.
La ropa semi-húmeda suele retener olores desagradables y es propensa a desarrollar manchas que pueden arruinar los tejidos, por lo que este método puede ser la solución ideal en estos días de clima húmedo.
¿Cómo aplicar este truco en la lavadora?
El portal 'El Mundo' recomienda los siguientes pasos:
- Inicie el ciclo de lavado como lo hace habitualmente, incluyendo jabón y suavizante.
- Al terminar el proceso de lavado y centrifugado, retire aproximadamente la mitad de las prendas.
- Coloque una toalla seca y limpia sobre la ropa que queda en la lavadora, cubriéndola completamente.
- Vuelva a meter la ropa que retiró, envolviéndola en la toalla.
- Si no cabe toda la ropa, ponga el resto encima de la toalla, procurando que quede dentro de ella en su mayoría.
- Cierre la lavadora y active de nuevo el centrifugado.
- Finalmente, saque la ropa y notará que tiene menos humedad.
Por qué funciona y otras opciones para secar la ropa rápidamente
La toalla absorbe buena parte de la humedad restante en las prendas durante el centrifugado, lo que facilita su secado posterior. Asegúrese de usar una toalla completamente seca y, al tender la ropa, colóquela en un lugar bien ventilado para evitar el mal olor. En un par de horas, la ropa debería estar completamente seca y lista para guardar.
Si este método no resulta tan eficaz como esperaba, existen otros trucos simples que puede probar. Por ejemplo, una técnica efectiva es extender una toalla seca sobre una superficie plana, como una mesa, y colocar encima la prenda que necesita secar. Enrolle la toalla con la prenda dentro y apriétela firmemente para eliminar el exceso de agua.
Otra opción consiste en usar una plancha a baja temperatura. Coloque la prenda sobre una toalla seca en una superficie resistente al calor y pase la plancha suavemente sobre la tela. Esto acelerará el proceso de secado sin dañar las fibras.
Para prendas pequeñas, también puede utilizar una secadora de cabello. Coloque la prenda sobre una toalla seca y aplique calor moderado desde cierta distancia, evitando que la tela se queme o pierda color.
Recuerde que evitar guardar la ropa húmeda es fundamental, ya que puede causar malos olores tanto en las prendas como en el armario.
SUSANA CARRASCO
El Universal (México) / GDA
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*Este contenido fue reescrito con la asistencia de una inteligencia artificial, basado en información de El Universal, y contó con la revisión de un periodista y un editor.