El escalofriante relato del actor Jack Merrill sobre su encuentro con el asesino serial John Wayne Gacy: ‘Me secuestró y me violó’

John Wayne Gacy es recordado como uno de los asesinos en serie más brutales y despiadados de Estados Unidos. Su seudónimo, “el Payaso asesino”, proviene de su trabajo como animador de fiestas infantiles, donde usaba un disfraz de payaso para acercarse a sus víctimas. 

Entre 1972 y 1978, Gacy perpetró al menos 33 homicidios, la mayoría de ellos jóvenes hombres, y enterró a 26 de sus víctimas bajo el suelo de su vivienda. 

Aunque falleció en 1994, el nombre de Gacy resurgió en los medios tras el impactante testimonio de Jack Merrill, un actor de televisión que afirma haber sido secuestrado, violado y amenazado por él a finales de los años setenta, solo siete meses antes de la captura del criminal.

Una terrible experiencia en manos de Gacy

Merrill, quien ha participado en series como 'La ley y el orden' y 'Grey’s Anatomy', reveló el doloroso episodio casi cinco décadas después. En una entrevista con 'People', recordó que había salido de practicar natación en la sede de la Asociación Cristiana de Jóvenes de Chicago, cuando Gacy, a bordo de un auto, se le acercó. Al principio, Merrill dudó, pero aceptó la oferta de Gacy para llevarlo. Sin saberlo, en ese instante comenzó una espantosa cadena de sucesos.

“A las pocas cuadras, se detuvo y me preguntó si alguna vez había consumido popper”, relató el actor sobre el momento en que Gacy sacó una botella marrón y, mojando un trapo, se lo aplicó a Merrill en el rostro. “Me desmayé. Y cuando recobré el conocimiento, estaba esposado... Lo siguiente que supe fue que estábamos afuera de su casa”, continuó en su relato sobre aquella noche aterradora.

Merrill, que tenía 19 años en ese entonces, confesó que su vulnerabilidad lo hizo ceder ante la situación. Describió a Gacy como un hombre corpulento de 36 años, y explicó que evitó enfrentarse a él para no provocarlo. “Si me hubiese resistido, estaría muerto. No tengo ninguna duda”, dijo el actor, quien trató de actuar con calma y “como si todo estuviera bien”.

Una amenaza constante que se extendió durante horas

Una vez dentro de la casa, Gacy le retiró las esposas y lo instó a compartir cervezas y fumar marihuana. En medio de esa tensa calma, el Payaso Asesino volvió a esposarlo y lo arrastró por el suelo. “Me colocó un artefacto que había armado él mismo alrededor del cuello... en un momento dado lo hice y comencé a perder el aire”, describió Merrill, quien aún siente la desesperación de aquellos momentos.

Además, Gacy le metió una pistola en la boca y abusó de él en un dormitorio. “Sabía que si peleaba con él, no tendría muchas posibilidades de salir vivo”, añadió Merrill. Durante todo ese tiempo, evitó manifestar terror y mantuvo la calma, incluso cuando empezó a ver al asesino con cierta compasión. “Sentí pena por él de alguna manera, como si no quisiera necesariamente estar haciendo lo que estaba haciendo, pero no podía parar”, comentó en la entrevista.

Luego de varias horas, Gacy se cansó y lo liberó. “Te llevaré a casa”, le dijo antes de dejarlo cerca de donde lo había recogido y darle su número telefónico, el cual Merrill tiró en el inodoro apenas llegó a casa. En ese momento, desconocía la verdadera naturaleza de su captor y no denunció el incidente a la policía.

Poco tiempo después, Merrill se enteró por el 'Chicago Sun-Times' de que habían descubierto cadáveres en la casa de Gacy. El criminal fue arrestado ese mismo año, y en 1980 recibió una condena de muerte que se ejecutó en 1994.

La Nación (Argentina) / GDA

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*Este contenido fue reescrito con la asistencia de una inteligencia artificial, basado en información de La Nación, y contó con la revisión de un periodista y un editor.